¿Como combaten en Sudamérica la invasión de avispas exóticas?

Argentina y Chile, entre otros países, están sufriendo desde los años 90 la expansión de la Vespula Germánica o Avispa Chaqueta Amarilla, una especie invasora que causa daños similares a la Vespa Velutina. Conocemos como las combaten en Sudamérica y que se puede aprender para luchar contra la avispa asiática en Europa

¿Como combaten en Sudamérica la invasión de avispas exóticas?

Vespula Germanica atacando a una abeja

La Vespula Germanica, también conocida por chaqueta amarilla o Yellow Jacket en inglés, por las bandas amarillas de su abdomen, es una avispa originaria de la región Mediterránea y que en los años 90 llegó a Argentina, colonizando el cono sur del continente, incluyendo Chile o Urugay, así como el sur de Australia y de Nueva Zelanda.

Al igual que la Vespa Velutina, su expansión fuera de su hábitat original es fruto de la globalización y, aunque en menor medida que la avispa asiática debido a su menor tamaño, la Chaqueta Amarilla también está provocando importantes daños en las colmenas, las plantaciones de frutales y viñedos y en el sector turístico. Su ciclo biológico también es muy parecido al de la Velutina, aunque los nidos son algo menores, pero pudiendo albergar hasta 6.000 individuos.

«Son todo un problema. En los últimos años hemos recibido numerosas consultas técnicas de organismos vinculados al turismo y la producción; en especial del sector apícola, que se queja por los daños», reconoce Juan Corley, investigador independiente del Conicet y titular del laboratorio de Ecología de Insectos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), de la provincia argentina de Bariloche.

Cuando atacan una colmena en busca de miel y de polen llegan incluso a desplazar a las abejas que la habitan, dejándola vacía. Además, su necesidad de azúcares las lleva también a nutrirse de frutas maduras, generando daños sobre las producciones de frambuesas y manzanas Como además son carnívoras, las Chaquetas Amarillas buscan la carne para satisfacer las necesidades de proteína de sus larvas. Y la consiguen tanto en el ganado herido y la carroña, como entre los restos de basura y las parrillas de los campings, pero también de polluelos y de un sinfín de insectos, con un incalculable daño en el medioambiente.

«En otoño, cuando se necesidad de proteínas es mayor, se vuelven muy voraces y muerden incluso a la gente», asegura el investigador del Conicet, quien sostiene que su impacto sobre el turismo es incluso mayor al que causan en las actividades productivas.

Nada que no nos suene de los estragos que está provocando la Avispa Velutina en Galicia y en otras regiones de Europa.

Los cebos tóxicos son de momento la estrategia más efectiva para combatir a la avispa Chaqueta Amarilla

Al igual que en Europa con la Velutina, de momento en Argentina están trabajando con métodos de control paliativos. “Es importante recordar que el problema de las chaquetas no posee soluciones mágicas o instantáneas. Esto tiene mucho que ver con la complejidad biológica del problema (hábitos de la especie, lugares donde nidifica, característica del ambiente). Algunos resultados de nuestras investigaciones contribuyen a aliviar localmente el problema”, explican desde el Grupo de Ecología de Poblaciones de Insectos INTA EEA Bariloche.

Así, en cuanto a las recomendaciones de control, este organismo público argentino son trampeo primaveral para capturar a las reinas fundadoras. Las trampas son idénticas a los empleadas en Europa, utilizando como líquido atrayente cerveza o vinagre de manzana rebajado con agua, para las obreras o un trozo de carne con grasa en las épocas de otoño.

Además, el Laboratorio de Ecología de Insectos del INTA EEA Bariloche puso a punto un método de control sobre la base de un cebo preparado con un tóxico. Se trata del Amaxis® Fipronil , desarrollado conjuntamente con la multinacional Bayer.

Este veneno, es un neurotóxico que es efectivo en dosis muy bajas.De esta forma, las avispas obreras llevan el veneno hasta el nido y se trasmite a toda la colonia por trofalaxia, el mecanismo mediante el que las avispas y otros insectos sociales se alimentan unos a otros y se transmiten feromonas.

Desde el INTA destacan también que como es específico para insectos, es poco tóxico para vertebrados en general. Está comercialmente disponible en Argentina en la mayoría de los locales relacionados con la venta de venenos para insectos.

En todo caso, los investigadores argentinos advierten de que “ambos métodos -el trampeo y los cebos tóxicos- alivian el problema de la chaqueta amarilla localmente y solo durante el verano en que se realice el tratamiento. El área tratada en un verano será con seguridad invadida por avispas reinas en la siguiente”.

Chile: Uso de cebos tóxicos y campaña nacional “¡Avíspate, atrapa a la reina chaqueta amarilla!”

Chile es otro de los países más afectados por la expansión de la avispa Chaqueta Amarilla. Sin embargo, aquí las administraciones si que se han implicado en combatirla coordinadamente. Así, el Ministerio de Agricultura, en colaboración con la Federación Red Apícola Nacional y los investigares del organismo estatal Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) han puesto en marcha a nivel nacional la campaña “¡Avíspate, atrapa a la reina chaqueta amarilla!”, www.avispa-t.cl , en la que se ofrece formación e información a toda la sociedad para combatir esta especie invasora, mediante la captura de reinas.

En este caso, las recomendaciones del INIA para un manejo de esta plaga son:

-Una correcta identificación de la avispa chaqueta amarilla, pues ayuda a la aplicación de un control correcto, oportuno y eficiente.

-Entre septiembre y noviembre (primavera austral), el control de reinas puede efectuarse sobre la base de la alarma que entrega el programa www.avispa-t.cl y mediante el uso de trampas desechables, que contienen agua y vinagre de manzana en partes iguales. Estas trampas se deben ubicar cada 50 metros, en lugares donde se observó avispas chaqueta amarilla la temporada anterior, o donde se mantiene madera apilada o árboles con muchos insectos produciendo mielecilla. Se recomienda instalar la trampa a dos metros de altura, evitando el sol directo.

-Cuando no hubo control eficiente de reinas, es más relevante el control de obreras utilizando cebos. Actualmente, el único registrado en Chile es Vespugard, desarrollado por INIA, que consiste en un cebo cárnico mezclado con un insecticida en muy baja dosis y de lenta acción, que logra controlar a las larvas y provocar, finalmente, la muerte del nido.

Otros cebos comerciales registrados son el Actara 25 WG y el Alsystin 480 SC. El Vespugard, recomendado por el INIA, está compuesto por Fipronil 1,5 DP, el mismo principio activo que el desarrollado por Bayer en Argentina.

Investigaciones en el uso de hongos:

El INIA de Chile también está investigando el uso de hongos perjudiciales para la Vespula Germanica, algo que también se está investigando en Europa para combatir la Vespa Velutina.

En concreto, los investigadores evaluaron el efecto de los Hongos Entomopatógenos (HEP), aislando 59, de los que 29 correspondieron al hongo Metarhizium anisopliae (Qu-M) y 30 a Beauveria Bassiana (Qu-B).
“Todos los aislamientos presentaron algún grado de mortalidad sobre las avispas chaqueta amarilla, siendo la cepa de Beauveria Bassiana B941 la que obtuvo mejores resultados , con un 100% de controla al noveno día de aplicada la cepa”, concluyen los autores del estudio.

Los hongos HEP son altamente específicos sobre los insectos a los que parasitan. De esta forma, las cepas de hongos que presentaban mayor mortalidad sobre avispas fueron también aplicadas sobre abejas, determinándose que la cepa Qu-B941 de la Beauveria Bassiana es la cepa que provoca una mayor mortalidad sobre las avispas y un menor efecto supresor para las abejas, comprobándose su alta especificidad.

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