La DO Valdeorras cifra las pérdidas de las tormentas en un 20%, en tanto en la DO Monterrei fueron de un 4%

Los viñedos más perjudicados de ambas denominaciones tienen daños importantes, pero el resto salvó la situación sin apenas pérdidas

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La DO Valdeorras cifra las pérdidas de las tormentas en un 20%, en tanto en la DO Monterrei fueron de un 4%

Buena parte de los viñedos de Monterrei y Valdeorras lograrán una vendimia normalizada.

Tras las tormentas y granizadas caídas hace unos días, los consejos reguladores de las denominaciones de origen afectadas, Valdeorras y Monterrei, ya hicieron un balance de la situación. El escenario es muy diverso dentro de cada denominación, pues hay zonas en las que los viñedos no sufrieron ningún daño, y otras en las que las pérdidas oscilan entre el 80 y el 100%, lo que representa un grave problema para los viticultores y bodegas más afectados.

En Valdeorras, las pérdidas medias se estiman en un 15-20%, si bien dado que la cosecha se presumía buena, con más de 10.000 Kg. por hectárea, se espera que las cifras globales de la vendimia en la denominación no se resientan sensiblemente en relación a otros años.

Hay en Valdeorras zonas con pérdidas importantes en el concello de Rubiá, en O Bolo o en Santa Cruz (Carballeda de Valdeorras). También en A Rúa hay viñedos que se vieron dañados por una tormenta el jueves 4, anterior a la de esta semana. Desde el consejo regulador de Valdeorras señalan que en los viñedos más tocados por el granizo, se produjeron pérdidas que pueden llegar al 80-90%, aunque otros muchos viñedos tienen pérdidas mínimas. La gran mayoría de los viticultores aplicaron además tratamientos estos días, con lo cual una buena vendimia media parece garantizada.

En la DO Monterrei, el consejo regulador cifra el impacto de las tormentas en un 4% de la superficie de la denominación. Son alrededor de una veintena de hectáreas de la denominación, principalmente en el ayuntamiento de Monterrei, en zonas como A Salgueira, Infesta y en zonas puntuales de Albarellos o Guimarei. Allí los daños fueron muy importantes en los viñedos, viéndose también alguna bodega afectada por inundación de sus instalaciones, como fue el caso de Crego y Monaguillo. Pero el resto de la denominación salvó la situación y la campaña se presume normalizada.

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