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Recomendaciones técnicas para elegir el ciclo y la variedad de maíz más adecuada

Recomendaciones técnicas para elegir el ciclo y la variedad de maíz más adecuada

Aspecto de DKC5741 en el momento de la cosecha. Mazorcas homogéneas, gran producción, excelente Stay Green, Sanidad y Digestibilidad.

A la hora de elegir la semilla de maíz, la primera decisión que debemos tomar es decidir el ciclo que vamos a utilizar. El ciclo de maíz es un índice establecido por la F.A.O. (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) en el año 1952, que en aquel entonces acordó clasificar los ciclos de maíz en 10 grupos de precocidad diferentes desde ciclo FAO 100 hasta ciclo FAO 1.000. Esta clasificación de la FAO, se basaba en los días entre la siembra y la maduración fisiológica del maíz en la zona del Corn Belt (Estados Unidos).

CICLO FAO

DÍAS

200

86-95

300

96-105

400

106-115

500

116-120

600

121-130

700

131-140

800

141-150

900

151-160

1000

+161

Actualmente disponemos de variedades comerciales comprendidos entre Ciclo FAO 200 y Ciclo FAO 700. Cuanto más largo es el ciclo, más tarda en madurar la planta de maíz.

El ciclo del maíz depende de la integral térmica, es decir, de la suma de temperaturas que el maíz acumula cada día desde el día de la siembra, hasta el día de la cosecha (en caso de silo) o hasta el día de la maduración fisiológica (en caso de grano). Cada variedad de maíz tiene su propia integral térmica, tanto a floración como a madurez fisiológica, y esta Integral es la misma todos los años. Lo que nos varía es el número de días necesarios para alcanzar dicha integral, o lo que es lo mismo, para alcanzar la madurez. Así en un año más cálido de lo normal el número de días necesario para la maduración va a ser menor, mientras que en un año de temperaturas más frescas de lo normal el número de días necesarios para alcanzar dicha madurez va a ser mayor.

Altitud y fecha de siembra: las variables que más afectan

Las variables que más nos afectan para recomendar sembrar un determinado ciclo son, principalmente, la Altitud con respecto al nivel del mar, y la fecha de siembra.

En las siembras tempranas de las zonas con poca altitud con respecto al nivel del mar, es donde recomendamos sembrar los ciclos más largos (FAO 600 y FAO 700), e iremos reduciendo ciclo a medida que vamos retrasando fecha de siembra ó aumentemos la altitud, hasta la recomendación de usar ciclos 200 en siembras de Junio y altitudes superiores a los 500 metros.

Recomendamos sembrar el ciclo más largo posible en cada zona

Para maximizar la producción, debemos sembrar el ciclo FAO más largo posible en cada zona, sin comprometer la correcta maduración de la variedad, y teniendo en cuenta que cada año climático es distinto. Por lo tanto, debemos ajustar el ciclo presuponiendo que el año climático será normal. Queda a mano de cada agricultor o ganadero el arriesgar un poco más sembrando ciclo más largo (ventajoso en un año más cálido) o un ciclo más corto (ventajoso en un año más fresco).

Una vez elegido el ciclo a sembrar, según la zona donde nos encontremos y según la fecha de siembra, pasamos a seleccionar la variedad más adecuada. Para hacer esta selección de forma correcta debemos elegir la variedad en función del uso final de la misma. Si nuestro uso va a ser silo para alimentar vacas de leche de alta producción, las recomendaciones para la elección de la variedad van en el siguiente orden:

1ª.- Sanidad Vegetal: Lo principal de nuestro silo de maíz es que sea “sano”, para eso es fundamental que la variedad presente una buena sanidad foliar, sobre todo frente a Roya y Helminthosporium (que son los hongos más abundantes en la Cornisa Cantábrica).

La única forma que tenemos de actuar frente a estas enfermedades foliares es la genética. Para poder recomendar las mejores variedades con la mejor sanidad, en Dekalb sembramos cada año dos Ministrips en Galicia y Asturias, donde testamos 60 variedades con 3 repeticiones en cada campo para seleccionar solamente aquellos híbridos que presentan una excelente resistencia a las enfermedades foliares, para garantizar que el futuro ensilado de maíz sea completamente sano para nuestros animales.

2º.- Stay-Green: La variedad debe mantenerse verde hasta el momento de cosecha. Solo con una planta verde podremos conseguir un ensilado bien conservado y bien compactado.

3ª Digestibilidad: Hablando de vacas lecheras de alta producción, la digestibilidad del ensilado es el siguiente punto en importancia, superando a parámetros como producción o almidón. La digestibilidad nos indica cuanto de lo que hemos producido es aprovechado por la vaca. La parte digestible es la parte que la vaca va a transformar en leche, y la parte no digestible, nos va a ocupar espacio en la panza de la vaca, sin aportar nutrientes. Cuanto más digestible sea una variedad más eficientes seremos en la producción de leche y mayor beneficio nos aportará esa variedad.

En nuestra red de ensayos de silo, buscamos variedades con excelente digestibilidad de fibras (D-FND). La D-FND tiene una enorme importancia cuando hablamos de variedades para ensilado destinado a vacas lecheras de alta producción, ya que a medida que aumenta la producción de leche, aumentan las necesidades energéticas del animal, pero no aumenta la capacidad de ingestión de la vaca, con lo cual un limitante en la producción es la digestibilidad.

*Ejemplo práctico de dos variedades con la misma materia seca e igual % de FND:

Variedad Dekalb: 30 kg silo maíz * 33 %ms = 9.9 kg de m.s. maíz * 45% FND = 4.45 kg de fibra * 60 % D-FND = 2.67 kg de fibras digestibles.

Variedad Competencia: 30 kg silo maíz * 33% m.s. = 9.9 kg m.s. maíz * 45 % FND = 4.45 kg fibra * 50 % D-FND = 2.22 kg de fibras digestibles.

Con este ejemplo podemos ver como 2 variedades aparentemente iguales (tanto en m.s. como en cantidad de fibra), el aprovechamiento por parte de la vaca va a ser muy diferente, ya que con la variedad Dekalb el animal va a disponer de casi 0.5 kg más de materia seca para transformar en leche.

Actualmente existen métodos de laboratorio muy fiables para medir la digestibilidad de una variedad.

4ª Producción: Ponemos la producción en 4º lugar, porque de nada me sirve producir muchos kg de un alimento, si después mis vacas no pueden transformarlo en leche. La producción debe medirse siempre en kg de materia seca por hectárea.

*Ejemplo:

Variedad A: 50 tonelas/ha con un 30 % de humedad son 15 toneladas/ha de materia seca.

Variedad B: 45 toneladas/ha con un 35% de humedad son 15,75 toneladas/ha de materia seca.

Vemos como en realidad, con la variedad B producimos 750 kg/ha más que con la variedad A, que nos había producido 5 Tn/ha más el día de la cosecha.

 

5º Almidón: El almidón es un tipo de azúcar presente en el grano de maíz y representa más de la mitad de la energía total del silo. Las variedades de Dekalb presentan altos niveles de almidones, que nos proporcionarán silos con gran cantidad de energía.

Cosecha Campo de ensayo Dekalb con excelente Stay-Green y Sanidad Vegetal. (Red de Ensayos Dekalb Cornisa Cantábrica).

Cosecha Campo de ensayo Dekalb con excelente Stay-Green y Sanidad Vegetal. (Red de Ensayos Dekalb Cornisa Cantábrica).

A medida que el grano de maíz madura, va aumentando el contenido en almidón y también aumenta la dureza del mismo. Para poder aprovechar la energía presente en el almidón es necesario triturar y aplastar los granos, pues de lo contrario se perderá parte de este almidón en las heces de los animales.

Las variedades comerciales que presenta Dekalb en silo, fueron minuciosamente seleccionadas en la red de ensayos de la Cornisa Cantábrica, seleccionando aquellas variedades con excelente sanidad y stay green, altísima producción de kg de materia seca por ha, y con excelente Digestibilidad de fibras y calidad de grano, todo esto da como resultado las variedades comerciales con los índices más altos en litros de leche por ha, que le ayudará a maximizar el beneficio económico de su explotación lechera.

*Autor: Pablo Amado. Asesor Agronómico

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