¿Tiene soluciones la crisis del sector lácteo?

El acuerdo adoptado en Francia entre ganaderos, industria y distribución para aumentar el precio de la leche en origen en 4 céntimos abre el debate sobre si también es posible una salida negociada en Galicia y en el resto del Estado

¿Tiene soluciones la crisis del sector lácteo?

El sector sufre una de sus cíclicas crisis de precios, similar a la del 2009.

La mayoría de los agentes del sector coincide en un análisis común de la crisis de precios del sector lácteo, que tiene dimensiones europeas e internacionales, pero con particularidades en Galicia. Donde no hay acuerdo es sobre si esa crisis puede tener una solución negociada a corto plazo o la única solución pasa por aguardar a un cambio de ciclo del mercado internacional. Esa es la primera cuestión a abordar, que en el fondo, se engloba en una pregunta más general y que se formula con frecuencia en estos tiempos. ¿Pueden (y quieren) los gobiernos gobernar la economía o son los agentes económicos los que tienen la sartén por el mango?

La segunda cuestión a gestionar, con vistas en el medio plazo, pasa por preguntarse si es posible evitar que la siguiente crisis de precios coja de nuevo en las mismas a todo el sector lácteo. Los actuales problemas sirvieron al menos para revelar que ganaderos, industrias, distribución y políticos llegaron al fin de las cuotas lácteas con los deberes sin hacer, con responsabilidades compartidas en mayor o menor medida por parte de todos.

Jesús Lence protagonizó una nueva salida de tono: «Los ganaderos se manifiestan porque les gusta la fiesta»

Las acusaciones recíprocas, como las vividas ayer en el Parlamento de Galicia en un estéril debate de 2 horas entre la conselleira do Medio Rural y la oposición, o salidas de tono, como la de ayer de Jesús Lence (Leche Río), que aseguró en declaraciones a una radio que los ganaderos se manifiestan porque les gusta ir de fiesta», poco ayudan a poner negro sobre blanco.

1) ¿Es posible un acuerdo entre ganaderos, industria y distribución que mejore el precio en origen de la leche?

Francia acaba de adoptar un acuerdo, con mediación gubernamental, para subir 4 céntimos el precio de la leche en origen de aquí a final de año, con subidas paralelas en las marcas blancas de la distribución. El Gobierno español duda de la legalidad del acuerdo, cuestión que trasladó a la Comisión Nacional de la Competencia y a la Comisión Europea. Entre tanto, en Galicia la Consellería do Medio Rural siempre mantuvo la postura de que los acuerdos de precios son una responsabilidad que atañe a dos actores privados, ganaderos e industrias, no a la Administración.

En cualquier caso, los problemas que atraviesa el sector llevaron a la Administración gallega a tratar de mediar en la crisis, pero se encontró a comienzos de julio con que las industrias se negaban en un primer momento a sentarse a hablar de precios con las organizaciones agrarias, alegando un supuesto temor a posibles multas de Competencia.

Llama la atención que en Francia se alcancen acuerdos con luz y taquígrafos y que en Galicia las industrias no quieran ni negociar

Cuando menos, llama la atención del sector que en Francia, donde las industrias también fueron multadas recientemente por Competencia, se llegue a acuerdos de precios con luz y taquígrafos, y que aquí en Galicia no hubiera hasta ahora ni tan siquiera las conversaciones entre las partes que se daban en otras épocas. Para hoy, la Administración autonómica ha convocado un segundo intento de acercamiento entre las partes (industrias, ganaderos y distribución), en una convocatoria encabezada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo.

El Ministerio de Agricultura de España, que sí estuvo gestionando en los últimos meses numerosas reuniones entre los distintos actores, tampoco logró avances significativos en los problemas del sector. Agricultura tiene convocada una nueva reunión entre todas las partes para el 18 de agosto para ver si se pueden alcanzar compromisos mutuos.

2) ¿Son posibles mecanismos de intervención públicos que eviten el desplome de los precios en el mercado europeo?

El fin de las cuotas fue la medida más visible del fin de la regulación del mercado lácteo en Europa, pero los expertos estaban tan o más preocupados por la eliminación en la práctica de la red de seguridad pública en situaciones de crisis. El precio de intervención para la leche en polvo se sitúa en los 16,8 céntimos por kilo, un valor incluso por debajo del precio actual de la leche en polvo en el mercado europeo -el menor desde 2009-, lo que revela la inutilidad actual del sistema de intervención.

En septiembre, los ministros de Agricultura de la UE revisarán la red de seguridad ante crisis, que se demostró inútil

El 7 de septiembre hay una reunión de los ministros de Agricultura de la UE en la que se abordará, entre otras opciones, la posibilidad de subir los precios de intervención, una decisión que permitiría sacar excedentes del mercado a través de la compra pública, lo que podría contribuir a una recuperación de las cotizaciones.

3) ¿Qué es preciso para que se garantice la recogida de toda la leche producida?

En los últimos meses, la industria gallega tuvo problemas para absorber los leves aumentos de producción que se generaron en Galicia con el fin de las cuotas. Esa situación llevó a que quedara leche sin recoger en el campo y a que parte de la producción se esté vendiendo a precios de leche en polvo, en el entorno de los 18 céntimos.

Tal situación, además de ser indicativa de la debilidad del sector industrial gallego, pone de manifiesto la necesidad de un diálogo fluido entre las partes para acompasar los volúmenes de producción con las necesidades de las industrias. La falta de negociación entre empresas y ganaderos, plasmada en el fracaso de los contratos lácteos, dificulta este proceso. Que más de un tercio de la producción gallega esté en manos de primeros compradores intermediarios tampoco contribuye a dotar de transparencia al mercado.

4) ¿Pueden funcionar contratos de compra venta que le aporten estabilidad a industrias y ganaderos?

Los contratos lácteos a un año entre industrias y ganaderos estaban pensados para dotar de seguridad y estabilidad al sector en cuanto a los precios de la leche y a los volúmenes de producción a gestionar. La negativa de la mayor parte de industrias a implantarlos llevó a un fracaso inicial del sistema que está por ver si se puede corregir.

Los contratos frenan el desplome de precios en las crisis, pero también moderan los aumentos en épocas de bonanza

La primera industria en España que aplicó contratos a un año con mecanismos de indexación de precios, Senoble Ibérica, los valora como muy positivos. El análisis de Senoble señala que los contratos contribuyen a frenar el desplome de precios en momentos de crisis pero que también moderan las alzas de precios en los momentos de bonanza del mercado, por lo que se presentan positivos tanto para industrias como para ganaderos.

El sector no entiende, por tanto, la negativa de las industrias a indexar los precios a índices como los diseñados por la Inlac, en tanto insisten en fijarlos con criterios arbitrarios. Tampoco se comprende que las industrias estén cancelando la recogida de ganaderos con contratos en vigor. En teoría esas prácticas están penalizadas por la normativa, pero las organizaciones agrarias critican la falta de agilidad en el control de irregularidades y hablan de una sensación en el campo de «impunidad total».

Cuando se cobra la leche a 40 céntimos, no existe interés en el sector ganadero por agilizar los contratos

De otro lado, en momentos de bonanza, cuando se cobra la leche a 40 céntimos, no existe ninguna preocupación ni interés en el sector ganadero por agilizar la puesta en marcha de contratos. Entonces hay productores que no tienen problema en abandonar la entrega a industrias e incluso a cooperativas para venderle la producción a empresas que ofrecen un mayor precio. Si los contratos se llegan a implantar con éxito en Galicia en algún momento, habrá compromisos a cumplir para todas las partes, en las duras y en las maduras.

5) ¿Puede evitarse la venta de leche como producto reclamo en los supermercados?

Ni la Ley de la Cadena Alimentaria ni las inspecciones de las Administraciones a supermercados y grandes superficies consiguieron evitar por ahora que se siga utilizando la leche como producto reclamo a bajos precios que rondan los 50 céntimos. Esos valores introducen una gran presión sobre el resto de la cadena de valor de la leche y ponen contra las cuerdas a industrias y ganaderos.

La distribución se comprometió a corregir la banalización del producto, pero las promociones a la baja continúan

Hace 15 días el Ministerio anunció un acuerdo con todas las asociaciones de la distribución para evitar que continúe la banalización del producto, pero estos mismos días hay promociones de supermercados en Galicia con leche a 53 céntimos el litro. Los sucesivos encuentros que se prevén entre todas las partes servirán para dilucidar si hay avances o no en esta línea.

6) ¿Qué pueden hacer los ganaderos ante la crisis?

Esforzarse en ser competitivos y en bajar los costes de producción es una obligación permanente para el sector productor, pero eso de poco sirve cuando se cobra la leche en el entorno de los 18-20 céntimos, situación en la que están más de 500 ganaderos en Galicia en estos momentos. Las protestas organizadas en el último mes, que están consiguiendo un gran respaldo ganadero, tratan de ser una vía para presionar a Administraciones e industrias en la búsqueda de soluciones.

Organizaciones agrarias y cooperativas han de cuestionarse si su estrategia de movilización es la correcta

Otra cosa es por qué esas protestas tardaron tanto en ponerse en marcha -salvo acciones puntuales en la primavera-. Organizaciones agrarias y cooperativas también deben hacer balance de las protestas mantenidas en los últimos años y preguntarse si su estrategia de movilización es la correcta, pues más allá de que las manifestaciones sirvan como desahogo puntual para los ganaderos, si la movilización no consigue logros, conduce a la frustración, a la impotencia y a la desmovilización futura ante nuevas crisis.

7) ¿Y esto no se soluciona con un grupo lácteo cooperativo?

Cuando la crisis asoma, vuelve a aparecer en el debate público la idea de un grupo lácteo de base cooperativa que industrialice la leche en Galicia. El fracaso de Alimentos Lácteos pone de manifiesto que la cosa es más fácil de decir que de hacer, pero también hay experiencias positivas, como la de las cooperativas que están gestionando Clesa, con el liderazgo de Feiraco, Irmandiños y Melisanto; y proyectos serios en preparación, como el encabezado por Icos.

En último término, la implicación de las cooperativas en procesos de transformación depende de los propios ganaderos. Que quieran o no invertir dinero para proyectos de transformación de los que no van a sacar rentabilidades a corto plazo, pero sí una mayor estabilidad.

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