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El nuevo modelo de contrato de compra venta de leche en el que se plasmarán las relaciones entre ganaderos e industrias fue ratificado por la Interprofesional Láctea (Inlac) con el único voto en contra de Coag, la organización estatal con la que mantiene una alianza el Sindicato Labrego Galego (SLG). La secretaria general del SLG, Isabel Vilalba, que participó en las reuniones de trabajo de la Inlac, resume los motivos de la oposición en tres puntos: el nuevo contrato no fija una leche tipo, no establece un sistema de mediación vinculante y hay una nula posibilidad de negociación de precios por parte del ganadero.
Para la organización agraria, el nuevo contrato, que ya se le trasladó al Ministerio para su homologación por trámite de urgencia, no representa ningún avance. “Hasta ahora, algunas industrias estaban estableciendo criterios arbitrarios en los parámetros de calidades (grasa, proteína, punto crioscópico, etc.), aplicando bajadas unilaterales de los precios o incluso dejando de recogerle la leche a las explotaciones en base a decisiones propias, no a unos criterios estándar aceptados por todos. Este nuevo contrato viene a consolidar esa situación de que la industria marque las exigencias que quiera, ya que no se establece una leche tipo”, critica Isabel Vilalba.
«O contrato nin fixa un leite tipo nin establece un sistema de mediación claro» (Isabel Vilalba, SLG)
Otro punto de disconformidad radica en la falta de una mediación específica cuando hay desacuerdo entre las partes. “En el contrato se ofrece la opción de una vista previa en la Inlac, de carácter no vinculante, y en caso de que continúe la disputa, hay dos opciones, o bien ir a la justicia común, o bien a un arbitraje del que no se aclara nada, ni costes, ni cómo se gestionaría ni que órgano haría ese arbitraje. Se nos dijo que iba a haber un arbitraje específico para el sector lácteo, pero está sin desarrollar”, cuestiona la secretaria general del SLG.
El último punto clave para oponerse al nuevo contrato es la cuestión del precio. “Los contratos entre ganaderos e industrias surgieron con la idea de equiparar la capacidad de negociación entre las partes, pero desde ese punto de vista son un engaño, pues el productor va a seguir sin tener capacidad de negociación y tendrá que aceptar el precio que le ofrezca la industria”, apunta Vilalba.
Interés
Tanto el Sindicato Labrego como Unións Agrarias-Upa, que sí votó a favor del nuevo modelo, cuestionan en cualquier caso que la Administración esté a “sacar pecho” de la aprobación del contrato. “No nos engañemos, el contrato es sólo una herramienta y el principal interés que tiene es que las industrias que se acojan al mismo no podrán introducir cláusulas que no estén en el modelo del contrato, es decir, no podrán poner cláusulas abusivas de manera unilateral” -valora Román Santalla, de Unións Agrarias-. “La cuestión del precio continúa sin resolver”, concluye.
«El contrato impedirá que la industria introduzca cláusulas abusivas de forma unilateral» (Román Santalla, Unións)
Desde Unións Agrarias explican que intentaron que el nuevo contrato recogiera una leche tipo en cuanto a calidades, pero señalan que las industrias se negaron en redondo a debatir ese punto. “Llegaron a hacer una consulta a la Comisión Nacional de la Competencia, que les dijo que no se podía establecer una leche estándar para regular los pagos” -señala Santalla.- “Quisimos entrar en ese punto, pero no fue posible”.
Así las cosas, la Interprofesional Láctea, tras el principio de acuerdo del martes, aprobó finalmente ayer el nuevo contrato homologado. El contrato fue ratificado por Asaja, Upa y Cooperativas Agroalimentarias por la parte productora, y por Fenil y Cooperativas Agroalimentarias por la parte industrial. Sólo Coag se opuso al pacto, por lo que el acuerdo salió adelante. Para paralizar el proceso era necesario que al menos dos organizaciones votaran en contra del nuevo contrato.
El presidente de la Inlac, Ramón Artime (Asaja), se felicitaba ayer por el acuerdo: “Desde la Inlac nos satisface mucho haber consensuado un documento único y claro que contribuya a darle más estabilidad y transparencia al sector lácteo”.
Más información
– Modelo de contrato de compra venta de leche aprobado en la Inlac
