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Un campo de demostración realizado en Carballedo (Lugo) concluye que el riego del maíz forrajero en Galicia puede incrementar los rendimientos hasta en un 80% en un año seco como el 2016 con respecto al cultivado en secano.
Así se puso de manifiesto en una jornada organizada el pasado miércoles por la Fundación José Luis Taboada (FJLT) en el Pazo de Cartelos, en este municipio lucense, y en cuyas fincas se realizó el ensayo.
El estudio, que lleva por título “Efecto del regadío en el rendimiento y valor nutricional del maíz forrajero”, forma parte de los trabajos de colaboración entre el Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo (CIAM), la Cooperativa ICOS y la Fundación José Luis Taboada (FJLT) dentro de las actividades del Plan de Transferencia Tecnológica de la Consellaría de Medio Rural.
Más del 90% del maíz que se cultiva en Galicia es en secano, lo que provoca que en años en los que los meses de julio y agosto son especialmente secos, bajen notablemente los rendimientos, incluso hasta niveles antieconómicos para este cultivo.
En este sentido, Juan Piñeiro Andión, patrono de la fundación e investigador jubilado del CIAM, explicó la ficha técnica de este campo de demostración del que concluye que existen buenas perspectivas para el regadío del maíz en Galicia mediante un sistema eficiente y poco costoso como es el riego por goteo mediante mangueras distribuidas por las filas de maíz.
El cultivo de maíz fue realizado en siembra tardía (mediados de junio) en el año 2016, que tuvo bajas precipitaciones en primavera-verano. El regadío, que se realizó por gravedad, comenzó el 12 de julio y finalizó el 12 de septiembre, poco antes de la cosecha que se realizó el 28 de septiembre de 2016.
Datos de rendimientos
A este respecto, Gonzalo Flores, jefe del Departamento de Pastos y Cultivos de Mabegondo, recordó que el cultivo del maíz es, junto con el de hierba “uno de los pilares sobre los que se sustenta la producción lechera de Galicia en base a sus buenos rendimientos, elevado valor energético y facilidad para ensilar correctamente”.
Sin embargo, dado que el cultivo se realiza en secano, la producción alcanzada es muy variable de año en año, dependiendo de las precipitaciones registradas a finales de la primavera y en la primera mitad del verano.
Los resultados obtenidos en el CIAM en los 15 últimos años muestran rendimientos medios de 13 toneladas de materia seca (MS) por hectárea y año, que pueden oscilar entre las 15-16 toneladas MS/ha en años lluviosos y las 9-10 toneladas MS/ha en años secos. Por otra parte, se observa en dichos trabajos que “las precipitaciones acumuladas en el mes de julio explican el 80% de la variación de la cosecha de maíz forrajero de un año para otro, y de ahí la importancia de realizar riegos puntuales y estratégicos”.
Con riego por goteo los rendimientos llegaron a 12,4 toneladas MS/ha
En este sentido, los investigadores del CIAM, en colaboración con los técnicos de ICOS y la ganadería “Carteiro de Trasar”, compararon los rendimientos de cultivo y el valor nutricional de la planta de maíz en tres parcelas del pazo de Cartelos, en Carballedo, una en secano con poca profundidad de terreno y en pendiente, otra con terreno más hondo y la tercera con riego.
En cuanto al rendimiento del cultivo, el ensayo revela que la producción de materia seca casi se duplicó aplicando riego: 6,3 toneladas frente a 12,4 toneladas MS/ha. En términos de producción de Energía Neta Leche por hectárea el incremento con regadío es de un 80%, el mismo porcentaje que si se analiza la producción de proteína.
Así se refleja en el siguiente cuadro:
Autor: Ciam/Ingacal
El contenido en almidón del maíz con riego casi multiplica por 4 el del cultivado en el peor terreno
En relación a la influencia de las características del suelo en el rendimiento de la planta se observan diferencias notables entre las tres parcelas en las que se realizó el ensayo. Así, en la parcela no regada con peor calidad del suelo el rendimiento fue muy bajo, de tan sólo 4,5 toneladas de MS/ha, llegando a las 8,0 toneladas MS/ha en la finca sin regadío pero con terreno más profundo y las citadas 12,4 toneladas MS/ha de la parcela en la que se realizó regadío.
En lo relativo a la composición química, destaca que el contenido en almidón del maíz producido con riego (22,1 %MS) es superior al cultivado en la finca en secano con buena calidad del suelo (18,4 %MS), pero casi multiplica por 4 el porcentaje de almidón del cultivado en el peor terreno (6,4 %MS).
Autor: Ciam/Ingacal
Necesidad de almacenar agua en charcas o estanques para riegos puntuales del maíz
Durante la jornada de transferencia fue comentada la tendencia a una mayor estacionalidad de las precipitaciones anuales, concentradas de forma cada vez más frecuente en los meses de otoño-invierno. Esto sugiere la necesidad y oportunidad de almacenar dichos excedentes mediante pequeñas obras hidráulicas (charcas o estanques) a fin de dar riegos puntuales mediante sistemas de goteo al cultivo del maíz en el período de máximas necesidades (julio y agosto), actividades que bien podrían ser incluidas dentro de las ayudas del PDR de Galicia 21014-2020.
