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El acuerdo lácteo, en vigor desde el 4 de octubre, continúa sin plasmarse en mejoras significativas a pie de campo, más allá de los anuncios de subidas del precio por parte de contadas empresas, como Celta o Entrepinares. Ante esta situación, las organizaciones agrarias demandan mayor agilidad en el cumplimiento del pacto por parte de Administración y empresas. El sector no descarta nuevas movilizaciones en cuanto finalice el ensilado del maíz.
Los ganaderos esperan que el acuerdo se traslade a los precios que perciben por la leche, pero la mayoría de empresas, con Lactalis a la cabeza, continúa por ahora sin mover ficha, lo que está generando malestar en el campo. Estos días incluso trascendió una bajada de 7 euros por tonelada que está aplicando Danone, si bien se trata de un descenso motivado por un contrato anual indexado a índices de mercado, no fruto de nuevos contratos.
«Da la impresión de que el acuerdo para lo que sirvió es para que las industrias ganen más» (Xabier Gómez)
Así las cosas, las organizaciones agrarias demandan una pronta resolución para dos cuestiones principales: el modelo de contrato tipo entre ganaderos e industrias y un decreto por parte del Ministerio de Agricultura que establezca un seguimiento obligatorio de los precios de cesión de la leche entre industria y distribución. El control de los precios de cesión permitirá conocer si las cadenas de supermercados están pagando un precio por la leche que le deje margen a las industrias para mejorar el valor del producto en el campo.
Valoraciones
Por ahora, parte de los supermercados ya elevaron los precios de venta al consumidor de sus marcas blancas de leche y otros se comprometieron a subir los pagos que le realizan a las industrias sin incrementar el precio de venta al público. Esas mejoras, con la excepción de las empresas que trabajan con Mercadona -Entrepinares, Celega, Iparlat, etc.- no están llegando de momento al ganadero. “Da la impresión de que las movilizaciones para lo que sirvieron es para que las industrias ganen más”- valora Xabier Gómez, del Sindicato Labrego.- “El acuerdo lácteo se basaba en la buena voluntad de las partes, pero más bien estamos viendo poca voluntad”.
«Esperamos que en breve se conozca el precio de cesión de la leche de las industrias a la distribución» (Javier Iglesias)
El responsable de Ganadería de leche de Unións Agrarias, Javier Iglesias, coincide también en que el acuerdo está “verde”, pero matiza que aún es temprano para comprobar los avances. “Contamos con que en la primera quincena de noviembre esté publicado el decreto que permitirá conocer el precio de cesión de la leche de la industria a la distribución, que es una cuestión básica para avanzar”, valora.
La Organización de Productores de Leche (OPL), por su parte, critica la lentitud con la que marcha la aplicación del acuerdo, en el que ve sobre todo “incumplimientos”, y advierte de que se convocarán movilizaciones en noviembre si no se producen mayores progresos.
La OPL propone convocar movilizaciones en noviembre si no se registran mayores avances
El sector espera que las mejoras que se están registrando en los contratos y en los precios entre distribución e industria se trasladen al campo. Ese es en teoría el compromiso de las industrias, si bien genera desconfianza en el campo que parte de las empresas lácteas le estén presentando a los ganaderos contratos a varios meses sin ninguna mejora. Desde las organizaciones agrarias, esperan que esos contratos se sustituyan en breve.
Primeros compradores
Otra cosa es el escenario que presenta el “agujero negro” de los primeros compradores, intermediarios entre ganadero e industria, que quedaron al margen del acuerdo y que siguen pagando precios muy por debajo de los medios en el mercado. Hay incluso casos de impagos de varios meses, con ganaderos que se están viendo apurados en comarcas como la de Santa Comba.
“Lo lógico sería que la Administración regulara esta figura de los primeros compradores y que fuera necesario el depósito de un aval para hacer frente a posibles impagos. No puede llegar cualquiera y hacerse primer comprador sin ninguna garantía”, valora Xabier Gómez, del Sindicato Labrego, que también considera que las industrias son las grandes beneficiadas por la presencia de intermediarios en el mercado que bajan los precios.
