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La Estación Fitopatolóxica de Areeiro (EFA), centro dependiente de la Deputación de Pontevedra, acaba de publicar el primer aviso fitopatológico del año, en el que recuerda la eficacia de las podas tardías (hasta primavera) en las especies leñosas. La técnico Rosa Pérez destaca que las podas ya estarán hechas en muchas especies leñosas (viña, frutales y ornamentales), pero señala que es posible realizarlas hasta incluso la entrada de la primavera.
Areeiro destaca que una poda tardía, cuando el zumo comienza a moverse en el interior de la planta, favorece la cicatrización natural de las heridas y hace menos probable que las heladas puedan afectar a los brotes cuando nazcan.
Por otra parte, subraya que hay más posibilidades de aplicar inmediatamente después de la operación, y sin que haya riesgo de toxicidad, los fungicidas cúpricos recomendables para prevenir el desarrollo de ciertos hongos causantes de las alteraciones de la madera, pues muchos de ellos penetran mayoritariamente a través de los cortes. En cambio, en la actual situación de temperaturas frías, los técnicos inciden en que no se deben aplicar fungicidas con cobre.
Otro de los consejos de Areeiro es retirar de la finca la madera de poda y nunca dejar o triturar e incorporar al terreno restos que se sepa provengan de plantas enfermas. Además, insiste en que las plantas muertas no solo deben cortarse, sino que hay que retirar igualmente el conjunto de tocón más raíces para reducir el riesgo de ataque de hongos de las raíces como ‘Armillaria’ y otros.
Cítricos
En concreto, con respecto a los cítricos, la Estación Fitopatológica señala que tras las lluvias -sobre todo si hubo retenciones de agua en el entorno de las raíces- pueden aparecer síntomas como caída de hojas, asociados a ‘Phytophthora cinnamomi’ u otras especies del género, que son bastante frecuentes en los cítricos. Ante la aparición de los primeros indicios es recomendable tratar con fungicidas a base de fosetil u óxido cuproso. En el caso de intervenir, se debe respetar estrictamente el plazo de seguridad del producto empleado.
También es frecuente en estos momentos ver frutos con la podredumbre típica de ‘Phytophthora hibernalis’. Al margen de la aplicación de fungicidas, es muy recomendable retirar del árbol, y también del suelo, la fruta muy afectada, pues si no se hace el riesgo de infección es elevado y pueden instalarse también otros patógenos oportunistas. En cualquier caso, y a pesar de estar autorizados, hay que recordar que los fungicidas de cobre no se pueden emplear con temperaturas frías como las de estos días.
Por otra parte, las temperaturas anormalmente altas de finales de enero en las horas centrales del día favorecieron la aparición de brotes en algunos árboles y sobre estos ya se pueden ver adultos y colonias de ninfas de la ‘psila africana’. El frío está frenando el avance de la plaga, pero es conveniente retirar los brotes afectados que sea posible.
Plantas de huerta, boj y pino
Desde Areeiro apuntan también que en estos momentos es frecuente ver daños por caracoles o babosas en las plantas de huerta. Se recuerda que hay substancias registradas para su control que pueden ayudar a reducir los daños, además de medidas culturales que limitan los ataques (el control de las malas hierbas o la eliminación de los restos de cultivos anteriores).
En cuanto al boj, en el laboratorio de la Estación Fitopatolóxica ya se detectó un inicio de la actividad de orugas invernantes de la ‘Cydalima perspectalis’ en una serie de brotes. Por este motivo, y aunque según las previsiones meteorológicas van a continuar los fríos en el exterior, se aconseja vigilar los brotes de las plantas por si aparecen los primeros daños.
Finalmente, en lo relativo a la procesionaria del pino, aunque las primeras procesiones de enterramiento ya hace tiempo que se han detectado -incluso en la semana pasada cuando las temperaturas no eran tan bajas-, es posible observarlas en algunas zonas, por lo que una vez más se insiste en que no se deben manipular bajo ningún concepto.
