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Asociaciones de propietarios forestales de toda España han participado en Viveiro en un seminario sobre política forestal organizado por la Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España (Cose). El acto, que contó con la colaboración de la Asociación Forestal de Galicia, fue clausurado por el secretario de Ordenación e Produción Forestal de la Xunta, Tomás Fernández Couto, que marcó como prioridad política la reducción del minifundio forestal.
“Cuando yo comencé a trabajar en el monte, hace cerca de 30 años, la gente más joven de las aldeas tenía 40 años. Ahora la gente más joven de las aldeas tiene 65 años y sus hijos viven y trabajan en las ciudades” -comparó Fernández Couto.- “En Galicia tenemos 15 años para impulsar medidas que estructuren el territorio y que reduzcan el minifundio, después ya no será posible porque no habrá con quien hablar en las aldeas”, valora.
«Cuando yo comencé a trabajar en el monte, la gente más joven en las aldeas tenía 40 años. Ahora tiene 65»
La escasa dimensión de las parcelas forestales en Galicia es considerada por el secretario de Ordenación eProdución Forestal como un “problema grave”. De no cambiar la situación, pronostica Fernández Couto, el abandono es la perspectiva a la que se enfrenta buena parte del monte gallego. ¿Quién va a ir a la aldea a gestionar parcelas de 2.000 metros cuadrados? ¿Va a haber relevo generacional? Yo creo que no. Habrá casos en los que sí haya relevo, pero mayoritariamente no”.
El secretario de Ordenación e Produción Forestal defiende la agrupación de la gestión de fincas a través de las Sofor como vía para ganar en dimensión. “No hay otra alternativa a las Sociedades de Fomento Forestal (Sofor)”, sostiene Fernández Couto. Las Sofor permiten agrupar la gestión de las parcelas, en tanto los propietarios conservan la propiedad. Hay ya 5 sociedades en marcha en Galicia y Couto adelanta la inmediata aprobación de otras 7.
Concentraciones privadas
El modelo de las Sofor, según destaca el responsable de Produción Forestal, permite además que los propietarios acometan una concentración privada de las parcelas incluidas en la agrupación, de manera que los terrenos de la Sofor queden agrupados, siendo también concentradas las parcelas de los propietarios que renuncien a participar en la sociedad. “La concentración privada la deben acometer los propietarios, pero tienen ayudas del 100% para infraestructuras, proyecto de ordenación, cortafuegos si son precisos o parques de madera. Para eso hay ayudas”, destacó.
Las Promas del norte gallego se plantean ralentizar la venta de eucalipto por los bajos precios
El seminario sobre política forestal, celebrado este jueves en Viveiro, contó también con intervenciones a cargo de las asociaciones de productores de madera (Promas) de la Mariña lucense, que pusieron en valor el modelo de asociacionismo de las Promas como manera de mejorar la selvicultura y la comercialización de la madera.
Bajada de los precios del eucalipto
En cuanto a cuestiones a mejorar, Ramón Reimunde, el presidente de Promagal, la federación que agrupa a las Promas gallegas, subrayó en el acto la preocupación de los propietarios por la bajada de los precios de la madera de eucalipto. “Desde comienzo de año, la bajada fue de 2 euros y se anuncia una nueva bajada de un euro a partir de julio por la caída de los precios de la pasta de papel”, critica Reimunde.
Ante esta situación, Reimunde destaca que las Promas están de acuerdo en ralentizar la venta de madera. Manuel Galdo, de Promavi, la asociación de propietarios de Viveiro, cuestionó también la bajada de precios y el monopolio que hay en la práctica en la compra de eucalipto por parte de Ence en la Mariña.
Galdo demandó además por parte de las Administraciones una mejora en la lucha contra el gorgojo del eucalipto y medidas contundentes en defensa del eucalipto globulus frente a la progresiva expansión del nitens, Otra de las cuestiones que interesa a los propietarios es la mejora de las vías de saca de la madera.
Por parte de la Asociación Forestal de Galicia, intervino Francisco Dans, que defendió la necesidad de un trato fiscal especial para el selvicultor activo, aquel que mantiene la gestión del territorio. El seminario contó también con la participación de la alcaldesa de Viveiro, María Loureiro.
