¿Que demandan los ganaderos de las zonas afectadas por incendios?

Movilizar las tierras abandonadas por parte de la Administración para ponerlas a disposición de los agricultores y ganaderos que las quieran trabajar; priorizar las políticas de prevención de fuegos sobre las de extinción; dejar de criminalizar a los ganaderos como autores de los fuegos cuando son los principales perjudicados o desbloquear las ayudas de la PAC a las explotaciones afectadas por incendios forestales.

Estas son algunas de las reivindicaciones de los participantes en la jornada monográfica sobre los incendios en Galicia que realizó este domingo a Organización de Criadores de Ovino y Caprino de Galicia (Ovica) y la Plataforma STOP Non máis Lumes no concello de Cualedro.

La elección de este ayuntamiento no fue casual, ya que los fuegos de este verano arrasaron más de 3.000 hectáreas en los ayuntamientos de Cualedro, Baltar, Trasmiras y Xinzo de Limia dejando sin pastos, e incluso sin establos y forrajes, a numerosas explotaciones ganaderas de la zona, fundamentalmente de ovino y de caprino.

Tras la jornada se elaboró un manifiesto con las siguientes conclusiones:

1. La principal causa de incendios en el rural ourensano es el abandono de las tierras agrarias. Este año en los cuatro ayuntamientos afectados por el incendio de 31 de Agosto y de 1 de Septiembre existen 40.244 has. incluidas en el SIGPac susceptibles de ser declaradas y utilizadas, pero de las cuales sólo se declararon un total de 9.738 has dentro de la campaña de la PAC 2015.

 “De 40.244 hectáreas de suelo agrario de los ayuntamientos afectados por el fuego de la Serra do Larouco solo 9.738 se declararon en la PAC”

Esto es un fiel reflejo de la realidad que están sufriendo estos Ayuntamientos y en especial el de Cualedro, donde la dinámica de despoblación en el rural conduce a la pérdida de territorio sostenido y sostenible en el tiempo con actividades agroganaderas. El abandono de las actividades en el territorio hace que este se encuentre en su mayoría a monte bajo, con una cantidad de biomasa que hace que sea especialmente susceptible a que las condiciones de sequía finalicen por desencadenar este tipo de incendios.

2. Es imprescindible que se pongan en funcionamiento medidas urgentes para recuperar la gente y el territorio abandonado. Debe dotarse de más medios al Banco de Terras para que realmente sea efectivo y ponga a disposición, en especial de los más jóvenes, tierras para poder iniciar su actividad.

Las actuales políticas aplicadas desde Santiago y Madrid no hacen más que ahondar en esta situación preocupante. En especial dos medidas: la primera es la transformación a CAP=0 de todos los recintos de menos de 3000 metros cuadrados con uso a pasto arbustivo o pasto sobre arbolado, lo que hace que muchos ganaderos y mancomunidades de montes vecinales en mano común pierdan muchas ayudas de la PAC a las que tendrían derecho desde Europa pero que la aplicación local de la normativa hace que se reduzcan los importes aprobados.

La segunda es que la obligatoriedad de presentar el número de DNI del titular catastral burocratiza una situación de minifundismo característico de Galicia. Y es que muchas parcelas pertenecen a herederos de herederos y van a dejar de ser mantenidas y gestionadas porque no pueden ser justificadas en la PAC de 2016 con esta normativa tal y como está planteada actualmente.

 “Existe un gran malestar entre los ganaderos porque se les criminaliza, cuando son los más perjudicados por los incendios”

3.Existe un gran malestar entre los ganaderos porque es el sector más criminalizado en el origen de los fuegos cuando en la realidad se trata del más perjudicado. Después de sufrir las consecuencias directas del incendio, la mayoría de las explotaciones tienen paralizadas las ayudas de la campaña de la PAC de este año porque precisan del informe del Distrito Forestal donde se detallan las parcelas afectadas en el incendio incluidas en la PAC de este año. Mientras el informe no llega al FOGGA, han paralizado los cobros de las ayudas, lo que probablemente derive en el cobro de todas las ayudas del 2015 y 2016, por lo que tendrán que hacer frente a un pago más elevado a la Hacienda por no poder fraccionar el pago en varios ejercicios.

Y esto unido a la sequía de este año, hace que muchos ganaderos no dispongan de liquidez suficiente para comprar el forraje para alimentar el ganado (hierba seca, paja, cereal o pienso) en la actualidad y tengan que tirar de sus ahorros pasados sI disponen de ellos, ya que tampoco pueden pastorear en terrenos forestales y de monte vecinal en los 2 años siguientes a que se produzca el incendio (Ley 3/2007 . Artículo 43).

4. La mayoría de incendios producidos por ganaderos se deben a incidentes o descuidos en el uso de la maquinaria agrícola y en la mayoría de los casos no intencionados, por lo que consideran injusto que se les equipare con el resto de incendios intencionados que se derivan de otras actitudes y otras circunstancias. Se debe invertir más tiempo y recursos en investigar las causas de los incendios y los verdaderos incendiarios.

5. Es necesario hacer campañas informativas, educativas y de divulgación medio ambiental entre los más jóvenes, en especial en el rural, porque son ellos los agentes, gestores y mantenedores del territorio y del paisaje en el futuro próximo. Esto propiciará que se eliminen pautas de comportamiento arrastradas de manera cultural y tradicional en épocas pasadas.

6. Se debe hacer un reparto más equitativo de los presupuestos. No se pueden destinar los presupuestos tan elevados en la actualidad para la extinción y es imprescindible realizar labores de desbroce y mantenimiento a lo largo de todo el año para reducir la cantidad de biomasa presente en el monte.

7. La administración debe tutelar un proceso organizativo y participativo donde se le dé voz y acogida a todos los agentes afectados (ganaderos, asociaciones de ganaderos, asociaciones ecologistas de defensa del medio ambiente, cazadores, ayuntamientos, empresas afectadas, etc…) para conocer sus ideas y tratar de darle solución entre todos. No se pueden tomar medidas de actuación sobre el territorio sin contar con la opinión y participación de la propia gente afectada que se encuentra en el medio.

8. La nueva PAC 2015-2020 basada de modo relevante en los desafíos territoriales y ambientales permite sin duda que se puedan articular mecanismos de ayuda y dinamización, que ayudarían a solucionar toda esta problemática.