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Los ganaderos gallegos de ayuntamientos limítrofes con Asturias y con Castilla y León y con fincas en esas comunidades se están viendo penalizados en las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) al negárseles todas las subvenciones vinculadas a los Programas de Desarrollo Rural (PDR) por las fincas que tienen en esas Comunidades, algo que hasta este año no ocurría.
Esta situación discriminatoria se trató en una mesa redonda celebrada el pasado 16 de junio en A Fonsagrada, organizada por la Asociación de Ganaderos de A Fonsagrada (Asgafon). Desde esta entidad informan de que este problema afecta, sólo en A Fonsagrada, a por los menos unas 20 explotaciones, la mayoría de vacuno de carne, pero advierten de que también es probable que haya casos similares en otros ayuntamientos fronterizos de la comarca como Negueira de Muñiz, Navia de Suarna o A Pontenova.
Y es que ocupación del territorio no entiende de fronteras, máxime en una zona en la que a ambos lados de la división administrativa comparten lengua, tradiciones y vínculos sociales.
Pérdidas de hasta 5.000 euros al año por explotación
Así, es frecuente que haya explotaciones ganaderas con terrenos a ambos lados de la división administrativa entre Galicia y Asturias. “Tenemos explotaciones que tienen un 5% de su base territorial en Asturias, pero otras que llegan al 49%, y este año no pueden cobrar gran parte de las ayudas por esos terrenos situados en Asturias”, explican desde Asgafon.
En concreto, las ayudas que les denegaron los gobiernos de la Xunta de Galicia y del Principado de Asturias son las vinculadas al nuevo Programa de Desarrollo Rural (PDR) y para las superficies localizadas en Asturias. Así, no perciben los pagos compensatorios para áreas de montaña; las ayudas agroambientales y de clima vinculadas a la gestión sostenible de los pastos y las ayudas de agricultura y ganadería ecológica.
El impacto económico de esta falta de colaboración administrativa es muy elevado para las rentas de los ganaderos. Según los cálculos de Asgafon, “lo perdido por las 10 explotaciones de Asgafon afectadas supone en un año un total de unos 50.000 euros; y entendiendo que los programas de los PDR son de 5 años, estaríamos hablando de unos 250.000 euros, y sólo en estas 10 explotaciones”.
Piden que la Xunta y el Principado se pongan de acuerdo
Hasta el año pasado, estas explotaciones ganaderas sí cobraron estas ayudas a través del Contrato de Explotación Sostenible (CES), asumiendo la Consellería de Medio Rural, previo acuerdo con el Principado de Asturias, el pago de las ayudas por esas superficies. Sin embargo, con la entrada en vigor del nuevo PDR de Galicia 2014-2020 y la supresión del CES dejaron de percibirlas. Según los ganaderos afectados, la opción que les ofrece el gobierno asturiano es que tengan un Códido de Explotación Agraria (CEA) en Asturias, algo que en la práctica supone trasladar la explotación a la comunidad vecina.
Desde Asgafon también mantuvieron reuniones con la Consellería de Medio Rural, pero sin llegar a una solución. Ante esta situación, los ganaderos convocaron a una reunión a los responsables de los Programas de Desarrollo Rural (PDR) de Galicia y de Asturias para intentar acercar posturas y conjuntamente buscar una solución a lo que consideran una “situación injusta”.
“Las explotaciones estamos donde estamos, y parece que estamos en tierra de nadie. Tenemos las mismas obligaciones y deberes ante la administración (….) y sólo queremos igualdad, y los únicos que pueden arreglarlo son las administraciones públicas de Galicia y de Asturias, que se tienen que poner de acuerdo”, exigen desde Asgafon.
Un ejemplo: la aldea de A Trapa
La aldea de A Trapa, en el ayuntamiento de A Fonsagrada, es un claro ejemplo de esta situación injusta. Casi la mitad de la aldea y de las fincas están divididas por el límite administrativo entre Galicia y Asturias. La falta de entendimiento entre las dos comunidades, llevó a que la gran mayoría de las explotaciones ganaderas de esta aldea no percibieran este año las ayudas vinculadas al PDR por las fincas que tienen en el Principado de Asturias.
Mercedes, una ganadera de A Trapa, es un ejemplo. Posee un rebaño de 44 vacas de carne y su ganadería tiene una base territorial de unas 40 hectáreas, de las que 13 están en Asturias. “Y por esa superficie -denuncia- sólo cobramos el pago base, pero ninguna de las ayudas vinculadas al PDR , ya que se entiende que son ayudas regionales, y al no haber coordinación entre la Xunta y el Principado este año no las podemos cobrar”.
«¿Que culpa tenemos de que haya fincas divididas entre las dos Comunidades?”
Asegura que con el anterior PDR de Galicia “sí las cobrábamos a través del CES, haciéndose la Xunta cargo de las ayudas por la superficie que teníamos en Asturias, pero ahora con el nuevo PDR nos dicen que no podemos acceder a ellas, y en el PDR de Asturias uno de los requisitos es tener un CEA en Asturias”.
“¿Que culpa tenemos de vivir dónde vivimos y de que haya fincas nuestras que estén divididas entre las dos comunidades?”, se pregunta Mercedes.
Ya llegamos a un punto que no interesa que viva nadie en el campo,si interesa mucho cobrar impuestos, solucionar el problema entre las dos Comunidades debe ser jodido, Solución quitar las Comunidades