Finca A Mata: un ejemplo exitoso de diversificación y producción sostenible

Visitamos Finca A Mata, una explotación que combina la ganadería de vacuno de leche, con la producción de quesos, la viticultura, el ganado ovino y en breve el turismo. Una exitosa apuesta por la diversificación y por la producción sostenible en base a los recursos de un entorno espectacular en el ayuntamiento ourensano de Manzaneda.

Finca A Mata: un ejemplo exitoso de diversificación y producción sostenible

Fernando con dos de los productos emblemáticos de su finca: el queso y el vino

Finca A Mata es una explotación agroganadera ubicada en la aldea de Langullo, en el ayuntamiento ourensano de Manzaneda, que lleva apostando con éxito por la diversificación de producciones, aprovechando los recursos del medio de una forma sostenible y creando valor añadido. Queso de leche de vaca, terneros, corderos, uvas, vino o castañas son las producciones que salen de esta finca situada en un entorno paisajístico privilegiado como son los cañones del río Bibei.

“Mi objetivo no es ganar dinero rápido, sino trabajar de una forma sostenible que me permita vivir dignamente a mi familia y a las próximas generaciones durante mucho tiempo”, resume Fernando Álvarez, un hombre que se siente feliz en este entorno y con su actividad. Junto a su compañera, Ana Pérez, y a dos empleados, trabajan una finca de 80 hectáreas, que permite combinar con éxito múltiples aprovechamientos.

Enamorado del campo desde niño, Fernando estudió Ingeniería Agrónoma en la Politécnica de Lugo. Tras finalizar los estudios, decidió volver a su casa natal y dedicarse a la actividad ganadera y vitícola. Eso sí, superando muchos obstáculos: “Soy el único de los cuatro hermanos que decidió quedar en el campo, y como joven tuve que superar una presión social muy grande para que me dedicase a otra actividad, desde los que me decían que esto es una esclavitud y que me iba a arruinar a los que me advertían de que no iba a encontrar una mujer que quisiese vivir conmigo en el campo”, reconoce Fernando.

Hoy, casi 28 años después, gracias al esfuerzo y a la confianza en su proyecto y a la apuesta por la diversificación y por producir aprovechando los recursos del entorno, hizo posible que finca A Mata sea no sólo rentable económicamente sino también una fuente de empleo y un atractivo turístico en el ayuntamiento de Manzaneda.

Producen leche de vaca en base a pastoreo y elaboran queso para el mercado local

Una de las principales actividades de Finca A Mata es la ganadería de vacuno de leche. Cuentan con un rebaño de 30 vacas de raza Holstein, de las que 24 son reproductoras y las demás recría.

Como en el resto de la explotación, la estrategia es producir aprovechando al máximo los recursos del entorno, en este caso la hierba, minimizando la compra de forrajes y piensos.

De este modo, las vacas pastan día y noche en las 30 hectáreas de praderas permanentes -no hacen renovación- con las que cuentan en esta explotación. En verano y en invierno, cuando se acaba el pasto, los animales reciben silo de hierba y hierba seca, producidos también en la propia finca, y un suplemento de cebada y maíz. Para la época estival, en Finca La Mata cuentan también con 2 hectáreas de pradera en regadío.

Fernando: “En la leche a pesar de que producimos menos, ganamos más”

Con esta ración los rendimientos medios rondan los 20 litros por vaca y día, una producción modesta comparada con los sistemas más intensivos, pero que ,como asegura Fernando, “a pesar de que producimos menos ganamos más”.

Este sistema semiextensivo también le permitió reducir considerablemente los gastos veterinarios -”prácticamente no hay mamitis, cojeras o problemas de cuajares”, destaca- incrementar la longevidad de los animales hasta superar los 8 partos de media por vaca y reducir notablemente la tasa de reposición.

Gracias también a las menores necesidades de recría, el 80% de las inseminaciones son con razas cárnicas. Los becerros son criados en la propia explotación, con leche de las vacas durante los dos primeros meses de vida -se la suministran en cubos-, y tras el destete son cebados con hierba, cereal y suero procedente de la elaboración de quesos. “Los cebamos durante algo más de tiempo, hasta los 10 o 11 meses de vida, y de este modo consiguen un peso de unos 200 kilos canal, pero sin pienso, y al mismo tiempo la carne está más hecha y tiene mejor textura y sabor”, destaca Fernando. Los terneros se los venden a un carnicero local, constituyendo una importante fuente de ingresos para la explotación.

Pero la principal actividad económica de Finca A Mata es la quesería en la que transforman los alrededor de 60.000 litros de leche que producen al año en unos 6.000 kilos de queso.

La quesería familiar comenzó a funcionar en el año 2010 como una alternativa ante la decisión de las industrias lácteas de dejar de recoger en esta comarca del oriente ourensano. Elaboran un queso tipo país y con poca sal con gran aceptación en los mercados locales de Manzaneda, Pobra de Trives, Castro Caldelas y O Barco de Valdeorras.

“Nuestros clientes valoran la calidad de nuestra leche y tenemos cada vez más demanda, sobre todo de gente que viene a visitar la explotación y aprovecha para comprarlo”, explica Fernando.

“Utilizo las ovejas para desbozar e ir creando pastos”

Para lograr los pastos que le dan el sabor y valor nutricional diferenciado al queso A Mata, las ovejas cumplen un papel fundamental. Un rebaño de 100 de estos pequeños rumiantes se encargan no solo de limpiar los prados después de que pasten las vacas, sino también de ir desbrozando y abonando las laderas a monte para ir creando pastos de forma natural. “Además, dan un cordero al año, más no les puedo pedir”, bromea Fernando.

Recuperando bancales de viñedos de la época romana

La otra fuente de ingresos importante de Finca A Mata es el viñedo, situado en una ladera de bancales orientados al sur sobre el valle del río Bibei, que según Fernando se remontan a la época de los romanos.

Este viñedo ocupa unas 20 hectáreas, que desde el año 1998 fue recuperando del abandono. Hoy tiene recuperadas 11 hectáreas, inscritas en la Denominación de Origen Ribeira Sacra, y está en proceso de limpieza y puesta en producción de las otras 9.

Al igual que con los pastos, las ovejas desempeñan una labor fundamental cómo cuidadoras de estos viñedos, pastando la cubierta vegetal y abonando el suelo entre los meses de octubre y marzo. “Trabajo de forma ecológica, sin utilizar herbicidas, y esta capa vegetal en el mes de junio seca con el calor y sirve también de protección contra la erosión”, explica Fernando.

«Decidí centrarme en la producción de uva de calidad”

En cuanto a las variedades, el 80% de las cepas son de Mencía, un 10% de Godello y otro 10% restante de Garnacha Tintorera. Tras probar en los primeros años con la elaboración y comercialización de su propio vino, la falta de tiempo y la necesidad de simplificar los procesos, lo llevó a optar por centrarse en la producción de uva de calidad que se la vende a una bodega de la Ribeira Sacra y solo vinifica y comercializada bajo su marca, “Ladeira da Mata”, unas 3.000 botellas. “Si bien es cierto que las producciones son bajas, alrededor de 60.000 kilos en un buen año, la uva de estos bancales es de excelente calidad y resulta muy apreciada”, destaca Fernando.

Esta explotación multifuncional completa su actividad con 5 hectáreas de roble americano y de castaño y con la próxima apertura de un alojamiento de turismo rural. “Mi proyecto siempre fue cerrar el ciclo y que la gente viniese a degustar y a comprar lo que producimos a la propia explotación”, explica Fernando. Un sueño, el de ser feliz viviendo en y del campo, que, a pesar de las trabas burocráticas, este campesino de vocación fue consiguiendo gracias a su determinación y visión de futuro.

As ovellas axudan a crear e a abonar os pastos

Tres ideas de Fernando Álvarez:

-”La administración debería poner menos trabas burocráticas a los que queremos seguir viviendo del campo y vender nuestros productos a un precio digno”.

-”Mi objetivo es seguir dedicándome a lo que me gusta y criar a mis hijos donde yo nací”.

-”Animo a la gente joven a que viva en la aldea, y apueste por trabajar de manera profesional aprovechando los recursos del entorno y generar valor añadido”.

l[email protected]

4 ideas sobre “Finca A Mata: un ejemplo exitoso de diversificación y producción sostenible

  1. Ana María Gómez Fresco

    Buenas, hace años visite la finca con mi marido, la intención del dueña era hacer una casa rural, desde entonces intento buscar información si al final está abierta pero no encuentro nada, me gustaría ir con mis hijas y que vieran todo lo que hacen allí. Gracias

    Contestar
  2. Santiago. R.

    Esta vivienda me comentaba mi padre que fue quemada no recuerdo si fue antes durante o después del 36.

    Contestar
  3. Marina Rodriguez

    La finca fue quemada algunos años despues de finalizada la guerra civil en 1939. Lo hicieron los escapados, asi se los llamaba en el lugar por estar profugos de la justicia segun el regimen franquista. Mi padre conocia bien la historia y fue de alguna manera parte de ella.

    Contestar
  4. Mamen Lozano

    Hola Ana María. Nos pasa como a ti, estuvimos hace algunos años y desde entonces de vez en cuando, sobre todo cuando abrimos una botellita de vino riquísimo que compramos allí, nos acordamos y buscamos en internet a ver si han abierto el alojamiento para volver.

    Contestar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Solicitamos su permiso para obtener datos estadísticos de su navegación en esta web, en cumplimiento del Real Decreto-ley 13/2012. Si continúa navegando consideramos que acepta el uso de cookies. OK | Más información